
También a lo largo de mi vida, he experimentado la relación con los demás y los espacios grupales, como lugares de exploración y crecimiento. He vivido cómo el cuerpo contiene, y refleja nuestro mundo emocional y por tanto ponerlo en acción y conectar con las sensaciones corporales, son vías privilegiadas para lograr un gran equilibrio como personas. Las herramientas para poner todo esto al servicio de mi labor, me las dio el Psicodrama; modelo terapéutico que está completamente integrado en mi manera de trabajar.